La imagen de María Santísima del Amor, la dolorosa a la que da culto la Hermandad de la Resurrección, está ya preparada sobre sus andas para la celebración del vía crucis que tendrá lugar el próximo sábado a partir de las ocho menos cuarto de la tarde, y que recorrerá algunas de las calles cercanas al templo de Santa Marina.
En la capilla donde está expuesta al culto durante todo el año, la Virgen del Amor está ataviada completamente de negro, con corona de plata, un corazón atravesado por un puñal en el pecherín, una corona de espinas en la mano izquierda, y un pañuelo y tres clavos en la derecha.
Las andas del vía crucis presentan este año como novedad una cruz con un sudario tras la dolorosa. Además, se estrenarán también los faldones, de terciopelo morado tachonado con flores bordadas en plata y algunos apliques plateados en la parte superior.
Las esquinas de las andas y los candelabros siguen siendo, como en años anteriores, elementos procedentes del paso del Señor Resucitado, del que formaban parte antes de que fuera modificado y enriquecido en los últimos años.
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